El lustro que pudo haber sido

Y no fue. Nunca estuvo predestinado, quién iba a decirlo. Podría haber sido un año distinto dentro de su normalidad, de su costumbre, pero no lo ha sido. Ha sido un cambio radical y aún no estoy del todo convencida de que haya sido un cambio para bien. La monotonía pudo conmigo en aquellos momentos y no es para menos, pero llegados a este punto no puedo hacer más que preguntarme si no debería haber aguantado un poco más, si no me compensaba. A día de hoy sigo sin saber qué podría haber cambiado para hacer que todo hubiera sido mejor. Sigo hurgando entre las pistas que me dejaste, en los indicios de que podíamos aspirar a una vida mejor para haber conseguido que aquella vida nos uniera. Pero no encuentro nada. No veo más que fracasos allá donde mire, en aquel punto de inflexión no había otra opción, así que me planteo cambiar ahora. Necesitarte de otra forma, quererte de otra forma. Podrían haber sido cinco años y podrían haber sido cinco más. Supongo que siempre queda esa posibilidad, esa esperanza (no sé qué palabra me deja en un lugar menos desesperado) pero por ahora solo queda el lustro que no va a ser.

Comentarios