Los gatos andábamos colgados, Lady Madrid

-Sonríe.
Y yo fui estúpida y sonreí.
Hoy he sido consciente de lo mucho que te necesito, cerca, junto a mí, que me pellizques y me hagas daño, pero que sigas haciéndome reír. ¿Que si te quiero? Claro que te quiero, te adoro, en muchos sentidos, y aunque alguno de ellos no sea correspondido, no me importa, mientras sigas diciendo que soy especial para ti.
Es suficiente, lo prometo.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Muy profundo y triste, (a mi parecer) tiene un ánimo de esperanza que llega a ser nostálgico, ¡Saludos!