Privacidad inexistente

Te necesitaba, te necesitaba más que nunca, que me dijeras que todo iría bien y que sólo eran cinco míseros días. No, esta entrada no va dedicada a ti, no me permitiré el lujo de ser más importante que nadie, tan sólo quería que me dijeras que nada iba a cambiar, todo estaría donde lo dejé cuando volviera, y tú con ello. Pero es inevitable, todo cambia y pese a ser yo la pesimista, lo cierto es que me deprime oírte hablar sobre lo que va a pasar porque me da la sensación de que no podré irme tranquila sabiendo que al bajar del avión estarías esperándome, cada vez tengo más la impresión de que no lo harás, y me da miedo. Eres la viva imagen de los celos, y eso estando conmigo no sirve de mucho, tan sólo para hacerme sufrir...
Quédate con tu orgullo, yo hace mucho tiempo que lo perdí.

Comentarios